En los tres últimos años hemos nos hemos clasificado una vez para la champions (la temporada pasada, luchando por la liga hasta la última jornada) y en dos ocasiones nos hemos quedado fuera por golaverage particular. Y es sobre esto sobre lo que pretendo reflexionar en las próximas líneas.
Y es que no es justo que el premio a la regularidad se otorgue por sólo dos partidos. Es cierto que el Atlético nos ha ganado este año en los enfrentamientos directos, pese a lo cual hemos acabado empatando a puntos. Esto quiere decir que, si la competición consta de 38 partidos, salvo en los dos antes mencionados, el Sevilla ha sido mejor que el Atlético en los 36 restantes. ¿No es esa la verdadera regularidad?. Parece que en Inglaterra, la cuna del fútbol, ya se enteraron de esto hace años y la clasificación queda ordenada por el golaverage general.
Tenemos más victorias, más goles a favor y mejor diferencia general del goles que el Atleti...pero ellos son los cuartos. Está claro que la Liga no premia la regularidad, sino momentos puntuales de la temporada.
Una vez hecho este comentario quiero felicitar a mi equipo por muchas cosas. Desde su capacidad de lucha para no rendirse en momentos de la temporada cuando era lo más fácil, hasta por la hombría de ser profesional hasta la última jornada y ganar el partido que dejaba al Bilbao sin Intertoto. Qué pena dar ver a equipos como Rácing y Osasuna amañar sus partidos (es mi opinión, pero tiene fundamentos) y adulterar de esta forma la competición. Lo siento por el Mallorca, que no ve recompensado su fulgurante final de campaña.
El año que viene seguirá Jiménez. La afición está dividia y creo que debe ser por sensaciones o juego del equipo, porque por resultados Jiménez es contundente. El Sevilla es el tercer mejor equipo de la liga desde que el de Arahal tomó las riendas (jornada 9). Y eso sin haber hecho pretemporada, con el palo de Puerta, con la huída de Juande, con la Copa de África, la plaga de lesiones en defensa...Y ha sido tercero.
Creo que merece el beneficio de la duda, empezar una campaña desde cero con la pretemporada, planificando fichajes y plantel de cara al próximo curso. El tiempo dará o quitará razones, pero de lo que no cabe duda es de que este entrenador dará todo lo que tiene dentro por el Sevilla, su Sevilla, nuestro Sevilla.
El año que viene afrontaremos de nuevo tres competiciones (por quinto año consecutivo) con la idea de clasificarnos para Champions, hacer una buena Copa del Rey y, quien sabe si traernos por tercera vez en cuatro años nuestra amada y querida Copa de la UEFA.

Mientras tanto, disfrutaremos de la Eurocopa (enhorabuena a Palop) y despediremos, si es que se produce alguna salida, a aquellos jugadores que abandonen nuestro club.
Ya contamos los días que quedan para el comienzo de la nueva temporada, la que haga justicia con nuestro Sevilla y pueda curarle las heridas que tanto daño le han causado. Aquellas en las que han hurgado los que han pretendido hundir la nave. Afortunadamente, la nave sigue a flote esperando nuevos retos en el horizonte. A prueba de temporales, comenzará su nueva travesía con ilusiones y esperanzas renovadas.

Y estaremos allí para contarlo...