Decepcionante comienzo

Perder el primer partido de Liga siempre es fastidioso y, si es ante un rival directo en la lucha por objetivos, mucho más.

La derrota ante el Valencia deja muchas preguntas sobre el tapete. No jugó de inicio ninguno de los nuevos y costosos fichajes y la linea media que se sacó, la más lenta posible, mostró lo que ya casi todos sabemos...que no funciona.

Luis Fabiano parece ausentarse cuando no juega con Brasil y Kanouté estaba pasado de revoluciones.

Pero lo más preocupante del equipo fue su actitud. Un sólo disparo a puerta en 90 minutos...poco bagaje para un equipo que, cuanto menos, espera repetir clasificación para la próxima Champions.

A ver si de una vez nos quitamos el miedo del cuerpo y vamos a todos, todos los campos a ganar y no a especular. Ya está bien de tirar siempre los primeros 45 minutos a ver que hace el rival. Tenemos que ser siempre nosotros. Porque, para mi, tenemos mejor plantilla que el Valencia. Me da igual si jugamos en su campo.

Hay que salir a ganar.

Y salir a ganar no es salir con dos delanteros. Siempre se pretende justificar este tema con lo mismo. Se puede salir con tres delanteros y defender con el autobús en el área chica. Y se puede salir con un sólo delantero y golear a domicilio.

Lo que marca las intenciones del equipo es la actitud sobre el campo.

Y mucho tiene que cambiar la nuestra para que lleguen resultados.

Sólo es un partido, si, pero muy desilusionante. Porque pocos días antes habíamos barrido a este mimso equipo en el Carranza.

Esperemos que ante el Zaragoza se vea al verdadero Sevilla y su verdadera ambición.